Tras ser lanzado en abril, el programa Ciudades de Oportunidades 2022 despertó el interés de cientos de comunidades con potencial innovador alrededor del mundo. Emprendedores sociales y equipos de gobiernos locales se unieron para diseñar iniciativas de alto impacto y formar redes capaces de implementarlas.
Finalizando agosto, esta iniciativa basada en la metodología de innovación sistémica llega a su mitad de camino con avances prometedores. “Los lazos que se empiezan a formar son muy poderosos. Las ciudades trabajan dentro de comunidades temáticas que aceleran las curvas de aprendizajes gracias al intercambio de experiencias”, contó a +Comunidad Candelaria Yanzi, coordinadora de Ciudades Innovadoras en RIL.
Según los problemas que buscan resolver, los equipos trabajan entre cinco comunidades: Desarrollo de Capacidades, Infancia Plena, Proyecto de vida, Hábitats dinámicos y Oportunidades económicas. “Descubrimos que hay temas comunes a los que dar respuestas en el mundo entero”, acotó Florencia Gay, también referente del Programa de Innovadores Locales (PIL).
“La mayor parte del aprendizaje de esta misión fue darme cuenta de que tenía conocimiento al que no estaba accediendo para permitir que las discusiones fluyeran mejor. Nuestro trabajo en equipo se fortaleció. Creo que podemos caminar con mayor conexión”, valoró Liliam da Silva, integrante de un equipo de la ciudad de Salvador (Brasil). Su proyecto, que forma parte de la comunidad de Infancia Plena, se basa en dar una solución a la falta de espacios verdes en barrios vulnerables.
Más innovaciones para seguir creciendo
Impulsado por RIL, Ashoka, Vía Educación y CoLab, organizaciones unidas en AYNI | Comunidades de Innovadores Locales, el programa 2022 está basado en el trabajo colaborativo y presenta una serie de evoluciones con respecto a las ediciones anteriores:
– Se refuerzan las redes de cambio, presentes desde el año pasado. “Es una de nuestras grandes banderas. Tuvimos experiencias con resultados increíbles, así que estamos potenciando el armado de ecosistemas locales para trabajar temáticas particulares”, apuntó Candelaria Yanzi.
– El programa es bilingüe desde el inicio, permitiendo un “salto de escala y de alcance”.
– Se incorporó la Misión Cero, un trabajo a nivel personal antes de adentrarse con las herramientas metodológicas y de diseño. “Establecimos valores como la empatía, la humildad y el compromiso que deben ser transversales a todos los equipos, a todas las temáticas y a todas las ciudades. Los vamos observando a lo largo de todo el proceso”, explicó Candelaria.
– Desde 2022, el programa ya no es un concurso.
En lugar de una evaluación final ante un jurado, ahora existen dos “momentos de corte”. Uno ocurre a la mitad, cuando se cierra la primera metodología de diseño. “Es un gran momento de retroalimentación y feedback con una mesa de inspiración en la que los equipos deben contar qué es lo que quieren generar, cuáles son sus teorías de cambio y cuál es la pregunta de diseño que los habilita a empezar el trabajo de ideación”, especificaron. La segunda ocurre al final.
– A partir de este año, AYNI propuso a los equipos locales incorporar la figura de comunicadores/as para la creación y el desarrollo del storytelling de los proyectos. “Deben contar el problema y sus soluciones. Tienen dos entregas a lo largo del proceso”, detalló Florencia Gay.
– Para esta oportunidad también se incorpora el rol de facilitación tecnológica para todos aquellos proyectos que así lo requieran.
– Algunas iniciativas desarrollarán planes de negocio en sus instancias finales. “Esto abre muchísimas puertas a la hora de buscar financiamiento”, observó Candelaria Yanzi.
– También está en formación la Comunidad Global de Innovadores Locales, un espacio de “acompañamiento entre pares”. Incluye a diversos actores y tiene como objetivos sistematizar los aprendizajes y fomentar procesos de replicabilidad a fin de acelerar las transformaciones en las ciudades.
Experiencias de cambio
La edición 2021 del programa tuvo como ganadores a equipos de Torotoro (Bolivia), Córdoba (Argentina) y Valledupar (Colombia). A fines de abril 2022, sus protagonistas vivieron una semana de inspiración y busca de oportunidades entre los ecosistemas emprendedores de la ciudad de Nueva York.
Finalizado el programa, los proyectos son visibilizados en el Marketplace de Soluciones Locales, un espacio para conectar a los innovadores con fondos de impacto y resolver colaborativamente los desafíos públicos más urgentes en las ciudades.
En 2022 se incorporan muchas novedades que se irán viendo a lo largo del desarrollo del programa. Entre ellas, se encuentra el lanzamiento de este nuevo suplemento para seguir el estado de los proyectos.
Imagen principal: proyecto de empoderamiento femenino en Ghana, 2021.
Redacción +Comunidad.